"CUANDO ME ENAMORO PIERDO EL RUMBO"
Más allá de su estilo desafiante y polémico, Ricardo Fort se puso serio y, en medio de la vorágine de su nuevo programa, habló de cosas muy íntimas que hacen a su familia, su infancia y sus miedos. “Siempre tuve temor a mi padre. Me decía que era incapaz” reveló.
En diálogo con A24, Ricky se mostró exultante por su ciclo Fort Night Show, y hasta chicaneó a Tinelli porque este sábado – que el Bailando se emitió en día especial por la muerte de Badía – “lo hizo a propósito para tirarme toda la artillería pesada a mí, y pasaron de Iúdica a Marcelo, de Marcelo a Listorti”.
Sin embargo, le tiró un centro al Cabezón: "Yo de Marcelo aprendí muchísimo, le tengo mucho respeto y estoy muy agradecido por el lugar que me dio. Al principio me puso de bailarín y después salté al jurado. Fue el año que más le midió en la vida” se agrandó.
Luego, apareció el Ricardo Fort más humano, al describir su idea de Felicidad: "La felicidad es un camino que recorrer, no es una meta. Uno va sintiéndose feliz día a día, yo vivo en el ahora. Ni vivo en el pasado, porque ya fue. No me preocupo de cosas que todavía no existen. Me pongo metas cortas. Hay que sentirse feliz ahora. Y la persona es feliz cuando trabaja y hace cosas, no rascándose".
Sobre su turbulenta infancia, contó que "Tuve una madre muy presente y protectora, y un padre ausente de cariño. Siempre tuve temor a mi padre. Las peleas venían porque él castigaba a mi madre para castigarme a mí. A los 14 años me quedé, de golpe, sin mamá y papá. No hablarme, no besarme, no nada. Ella me alejó a propósito para que me pegara más a mi padre, algo que no ocurrió. Fue duro, muy feo. Mi padre me decía que era incapaz y yo con mis hijos hago totalmente lo contrario. A mis hijos les digo que van a hacer mucho mejor que yo. Vos los ves y son felices, son generosos, comparten todo con sus compañeros. Los crio con todo el amor que no tuve".
¿Y el amor? "Cuando me enamoro pierdo el rumbo totalmente". "Me enamora admirar a la persona que tengo al lado. Yo creo que la sexualidad, la homosexualidad o la bisexualidad la gente lo toma naturalmente y es algo natural y normal”. 100 % Fort.
En diálogo con A24, Ricky se mostró exultante por su ciclo Fort Night Show, y hasta chicaneó a Tinelli porque este sábado – que el Bailando se emitió en día especial por la muerte de Badía – “lo hizo a propósito para tirarme toda la artillería pesada a mí, y pasaron de Iúdica a Marcelo, de Marcelo a Listorti”.
Sin embargo, le tiró un centro al Cabezón: "Yo de Marcelo aprendí muchísimo, le tengo mucho respeto y estoy muy agradecido por el lugar que me dio. Al principio me puso de bailarín y después salté al jurado. Fue el año que más le midió en la vida” se agrandó.
Luego, apareció el Ricardo Fort más humano, al describir su idea de Felicidad: "La felicidad es un camino que recorrer, no es una meta. Uno va sintiéndose feliz día a día, yo vivo en el ahora. Ni vivo en el pasado, porque ya fue. No me preocupo de cosas que todavía no existen. Me pongo metas cortas. Hay que sentirse feliz ahora. Y la persona es feliz cuando trabaja y hace cosas, no rascándose".
Sobre su turbulenta infancia, contó que "Tuve una madre muy presente y protectora, y un padre ausente de cariño. Siempre tuve temor a mi padre. Las peleas venían porque él castigaba a mi madre para castigarme a mí. A los 14 años me quedé, de golpe, sin mamá y papá. No hablarme, no besarme, no nada. Ella me alejó a propósito para que me pegara más a mi padre, algo que no ocurrió. Fue duro, muy feo. Mi padre me decía que era incapaz y yo con mis hijos hago totalmente lo contrario. A mis hijos les digo que van a hacer mucho mejor que yo. Vos los ves y son felices, son generosos, comparten todo con sus compañeros. Los crio con todo el amor que no tuve".
¿Y el amor? "Cuando me enamoro pierdo el rumbo totalmente". "Me enamora admirar a la persona que tengo al lado. Yo creo que la sexualidad, la homosexualidad o la bisexualidad la gente lo toma naturalmente y es algo natural y normal”. 100 % Fort.
