Fort, Jorge Rial y una charla inesperada en Mendoza

A casi un año de la declaración de guerra, haciendo pública su enemistad, la pelea mediática entre Ricardo Fort y Jorge Rial tuvo en Mendoza un capítulo inesperado.
El empresario y el periodista se encontraron sorpresivamente compartiendo un asado en la estancia San Isidro, propiedad de la familia Vila. Invitados a la Vendimia Solidaria, Fort y Rial no se saludaron y mantuvieron distancia durante casi todo el día del domingo pasado.


Sin embargo, no pudieron evitarlo y sellaron el momento del rencuentro cara a cara con una breve y frontal charla entre las mesas del lugar, mientras Palito Ortega cantaba sus clásicos para poner punto final al evento.
Quien se acercó en son de paz fue Ricardo Fort. “Vos lo viste, él me vino a saludar y yo no soy maleducado”, justificó más tarde Rial. La otra campana atinó a decir: “Está todo bien, no pasó nada”.
El eje de la reunión pasó por un agradecimiento de parte del mediático “por algo que le aconsejé acerca de su estado de salud”, contó el conductor de Intrusos (América TV) y Ciudad Goti K (radio La Red).
Fort se sometió a una seria operación de columna en setiembre pasado. Y es un tema que está presente en cada entrevista con el empresario. “Volví a nacer, cambié mucho con lo que pasé. Por eso, ojalá vuelva a ser jurado del ‘Bailando por un sueño’, para demostrar este año otra personalidad. Basta de peleas tan agresivas, siento que se me fue la mano”, confesó Fort a Escenario & tendencias.
De todas maneras, durante el encuentro los dos personajes mostraban seriedad en el diálogo y pocas sonrisas, sus gestos hacían suponer deudas sin saldar y pases de facturas de un enfrentamiento que empezó cuando Fort supuestamente dejó entrever que Rial había “robado” a una de sus hijas adoptivas. El conductor le contestó duro desde su programa de TV, amenazándolo con pegarle “un tiro en la nuca” si se metía con su familia.
El escándalo llegó hasta tribunales debido a la denuncia de Fort por amenazas de muerte.
Ahora en más serán tantas las ansias del ex jurado del “Bailando” por atravesar una etapa menos confrontativa en su vida pública que hasta le regaló su último material discográfico a Rial después de la reunión.
El disco, grabado en Miami, es un homenaje a Sandro y lleva por título Como lo hice yo.
Antes de esta ¿tregua?, el rey del periodismo de chimentos analizó la temporada de verano, en la que participó Fort como productor de la obra Mi novio, mi novia y yo en Carlos Paz.
“Fue de las más pobres y de las más violentas de los últimos años. Pobre de personajes, con violencia verbal muy fuerte. Pasó sin pena ni gloria. No fue buena para los teatros tampoco. El balance es bastante negativo”, opinó.
Para completarla, arremetió: “El que diga que le fue bien miente. Los empresarios quieren ganar fortunas y no son capaces de adaptarse al bolsillo de la gente, que pasó un verano duro. Por la soberbia que caracteriza a muchos de estos empresarios, prefirieron perder plata”.
Ante estas declaraciones, Fort no tardó en responder: “La temporada fue maravillosa, en Carlos Paz fue increíble gracias a la gente del interior del país. No sé qué opina Rial si él no estuvo en ninguna obra. ¿Qué produjo él? Yo como productor te digo que me fue muy bien, fue el primer año que no tuve que regalar entradas. No puse plata de mi bolsillo, tampoco es que gané mucho dinero pero no perder es muy importante”.
Cada uno en su posición, lo cierto es que después de comer en San Isidro en mesas separadas (Rial compartió la principal y Fort se sentó con Vanesa Cardone y su ¿novio?, Julio Coronel), terminaron bien cerca.
Después del saludo, Fort se sentó frente a Rial en la mesa del conductor para disfrutar del concierto de Palito Ortega. Ahí fue cuando le regaló su CD y al momento de partir, esta vez fue Rial quien lo saludó. Claro, se dio así porque el periodista se despidió primero del lugar.
A Fort le quedaba todavía su momento protagónico de la velada, para cantar con piano y a cappella un breve set romántico.

Carolina Baroffio
uno_escenario@diariouno.net.ar

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