Matías Alé: “Si la infección llegaba al corazón, me moría”


Tras una operación de menisco en su rodilla izquierda, el actor contrajo una bacteria intrahospitalaria y debió ser intervenido tres veces más. En tan sólo dos días le extrajeron 15 jeringas con pus. En el Instituto Fleming y con una guía en su cuello,Matías Alé le relató a Caras su lucha contra el Estafilococo áureo.

Estuve realmente muy complicado. Tuve una infección causada por una bacteria (Estafilococo áureo) que había ingresado al torrente sanguíneo. Si llegaba a las arterias coronarias o los pulmones, significaba la muerte. Si los médicos no hubieran reaccionado a tiempo, me podrían haber amputado la pierna izquierda. De sólo pensarlo me dan escalofríos. ¡Llegaron a sacarme 15 jeringas grandes de pus en tan sólo dos días! Fue algo tremendo, le contó en exclusiva a Caras el actor, sumido en un mar de lágrimas en su habitación del 5o piso del Instituto Alexander Fleming, de Belgrano.
“Los médicos me dijeron que ocurre en un 0,02 por ciento de los pacientes en los que se practica una artroscopía. Y bueno, me tocó. Es un aprendizaje más. No tengo fuerzas para nada, la morfina me voltea y me la paso durmiendo. Estoy tumbado. Al principio, ni siquiera podía ducharme solo. Fue el momento más angustiante y doloroso que me tocó vivir, y definitivamente esto será un gran cambio para mí”, dijo Matías.
En esta historia hubo una persona clave en la vida de Alé, y se llama Ricardo Fort. Gracias a su generosidad, Matías fue trasladado el sábado 22 a Buenos Aires en su avión privado y atendido de urgencia por su médico personal, el Dr. Guillermo Cardinali, jefe de Traumatología del Fleming.
“La generosidad de Ricardo me salvó la vida”, asegura Alé. Con estas cosas te das cuenta de la gente que Tenés a tu alrededor. Por suerte, estuve contenido por mi familia, que en ningún momento me dejó solo y me dio todo el apoyo que, aún hoy, necesito. Mi vieja, Elena, se queda todas las noches a cuidarme y prácticamente tengo que echarla. Muchas personas me brindaron su apoyo en este mal momento. Graciela (Alfano) y Silvina (Escudero) se contactaron conmigo para saber sobre mi estado de salud. Mis amigos y toda mi gente seguidora en Twitter también. Y a todos les digo gracias, porque la buena onda, sus oraciones y cartas de optimismo me llenaron de energía y hoy estoy para contarlo”, comentó emocionado.
Fotos: Revista Caras

Entradas populares